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4 Reseñas

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Discurso de Graduación pronunciado por el graduando José Rafael Caraballo en el Acto de Imposición de medallas de la Escuela de Derecho del 27 de noviembre del año 2014

Muy buenos días,

Ciudadanos profesores autoridades de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas

Profesora Yaritza Pérez Pacheco, Directora de la Escuela de Derecho

Profesora Eloisa Avellaneda, Directora de Coordinación Académica

Profesora Lourdes Wills, Directora de Coordinación de Investigación

Profesor Carlos Luna, Director de la Escuela de Estudios Políticos y Administrativos

Profesor Leonel Salazar, Director de Coordinación Administrativa

Profesor Santo Morrone, Director de Coordinación de Extensión

Honrados graduandos y familiares,

La persona más sabia que conozco una vez me dijo unas palabras que cambiaron mi modo de pensar. Quisiera compartirlas con ustedes con la esperanza que de algún modo puedan inspirarles.

Me explicó como «Dar el ejemplo no es la principal manera de influir sobre los demás; es la única manera». Hoy día, sé que esa frase la plagió de Albert Einstein, por lo que, aunque no la inventó él, sin duda alguna la adoptó para su vida propia, de la cual a continuación les voy a contar un poco.

Él me contó un día que estaba acostado y sin fuerzas para levantarse, como pudo lograr una de las cosas que él más ha apreciado. Aunque siempre tuvo gran pasión por el estudio, nunca pudo hacerlo más allá de sexto grado en algún colegio, escuela o liceo, porque estaba limitado de recursos, y para seguir viendo a su familia comer tuvo que dedicarse a trabajar.

Llegó el día en que esta casa de estudios abrió al público en Maracay uno de los primeros programas en Venezuela en materia de Administración de Personal, una oportunidad que él no desaprovechó. Para mantenerse estudiando y trabajando, tuvo que dedicarse a asistir al curso los viernes, sábados y domingos para, luego de cuatro años, poder obtener finalmente una carrera.

Así, mi Cid Campeador me enseñó, no con regaños y mandatos, sino como con su ejemplo, a través de la perseverancia, esfuerzo y voluntad se pueden alcanzar las metas que más deseas.

Por eso actualmente, mi abuelo, que no está acostado, sino de pie, como lo veo cada fin de semana, se le escapa una gran sonrisa al escuchar a la Universidad Central de Venezuela. Porque siempre recordará y estará eternamente agradecido con este hogar por haberle permitido lograr uno de sus sueños.

Como se siente él desde aquel momento, nos sentimos nosotros aquí y ahora. A partir de este instante nos toca abrazar con inmenso cariño a la primera universidad de Venezuela por habernos abierto las puertas para alcanzar nuestra titulación.

Sentimos que hemos visto, crecido y cambiado tanto pero sabemos que aún nos queda mucho por hacer.

No reconoceríamos a quienes se sentaron en estas aulas el primer día de clases. Hemos reído y llorado, hecho amistades y peleado con ellas, estudiado y flojeado un poco, aprobado y raspado exámenes,(…) ganado y perdido, nos hemos enamorado y nos han roto el corazón. Pero sobretodo hemos amado.

Ahora entendemos porqué nuestro insigne ucevista, recientemente fallecido y desarrollador de la vacuna de la lepra decía “los sentimientos de amor hacia el ser humano estimulan la vocación de servicio, que no es otra cosa que un profundo amor a la vida”, porque hoy por encima de todo hemos vivido, y sabemos que se siente vivir plena y vibrantemente.

Suena fácil decirlo, pero vemos como el sudor de nuestras frentes hoy se convierte y materializa en un orgullo: el de ser egresados de la Universidad Central de Venezuela.

¿Cuántas veces pensamos en rendirnos? ¿Cuántas veces creíamos que estábamos bien y luego estuvimos obligados a comenzar de nuevo? Incluso dudábamos de si valdría la pena. Pero tomamos una oportunidad, al centrarnos con determinación en una visión, y llevamos nuestro sueño a este destino.

Este logro no nos pertenece exclusivamente a nosotros. Los héroes silenciosos de nuestras vidas también celebran este triunfo. Lo que hemos logrado fue fruto de un trabajo conjunto  de nuestros padres, familiares y seres queridos. Tantos errores que cometimos por la misma inexperiencia que nos soportaron y ayudaron a superar. ¡Cuántas veces pensamos que ellos estaban equivocados y nosotros éramos quienes tenían la razón!

Siempre recordaré como vi a un niño que, para superar sus grandes problemas para redactar, se quedaba en vacaciones con su mamá entre libros y escribiendo. Ella incluso le arrancaba las páginas enteras del cuaderno si encontraba un solo error de redacción, y no le importaba que el niño terminase llorando.

Antes de subir acá, fue a mi mamá a quien vi con lágrimas de felicidad.

Debemos agradecerles a ellos por guiarnos porque al final de este camino, estamos bajo estas nubes de gloria y alegría.

Es por estos líderes que seguimos teniendo fuerzas para terminar nuestro cometido. Ellos no son solo nuestra razón de ser, sino que se convierten en la piedra angular de la nuestra lucha de todos los días.

No me atrevería a dejar por fuera al cuerpo de profesores que son las columnas que forman el templo de la academia.

Si trasladáramos a estos tiempos los cuentos de niñez basados en la Edad Medieval, ustedes serían nuestros caballeros con armadura brillante que salvan a al reino. Porque aunque quienes ejercen el Poder Político les quiten el oro y plata que ustedes usan para obtener las espadas y escudos y así dejar a las nuevas generaciones sin formación, nuestra alma mater en cumplimiento del primer artículo de la Ley de Universidades, nos reunimos en la tarea de buscar la verdad y afianzar los valores trascendentales del hombre, para así estar constantemente venciendo las sombras

Gracias a ustedes, mediante el debate de ideas y el pensamiento crítico, entendemos que nuestras fuerzas deben estar direccionadas a que el Derecho no sea usado como un arma política, sino que se circunscriba en una teoría pura. En palabras de, quizás el mejor jurista de todos los tiempos, Hans Kelsen “Aquí solo puede tratarse únicamente de poner en movimiento más acelerado a la ciencia del derecho. En verdad, el pleito; se trata de la relación del derecho con la política, de la neta separación entre ambas; de la renuncia a la arraigada costumbre de defender exigencias políticas que solo poseen un carácter supremamente subjetivo aun cuando, con la mejor fe, aparezcan como el ideal de una religión, una nación o clase”.

Se tiene que cerrar la brecha que existe entre el deber ser y lo que es nuestro sistema de justicia. Podemos ver en cada tribunal como resuenan las palabras de Piero Calamandrei cuando decía “Afortunada coincidencia se verifica cuando de dos litigantes el más sabio es el más justo. Porque cuando eso no ocurre se corre el riesgo que el proceso, que fue creado como instrumento para darle la razón al justo, se convierta en un instrumento de habilidad técnica para darle la victoria al más astuto”.

¿Es que acaso deberíamos dedicarnos a estudiar la viveza y picardía? Quizás entonces, estaba en lo correcto Pedro Carujo sobre nuestro primer rector, y el mundo es de los valientes por encima del hombre justo, del de bien y del que está seguro sobre su conciencia. Al fin de cuentas fue Vargas quien fue arrestado.

Algunos nos quieren hacer creer que esto sería lo mejor para no ser abatidos por el sistema existente.

Hoy tengo el trabajo de recordarles que el estudio de la ciencia jurídica no es en vano. Así como en tiempos de epidemia se necesitan más médicos, estamos obligados a ilustrarnos en Derecho y así aportar el alimento intelectual que tanto escasea en las calles de nuestra patria.

Con el inicio en este cabildo abierto de una fuerza transformadora de conciencia, se obligaría al Poder Judicial a estar ceñido al Derecho, volviéndose en una verdadera administración de justicia, que proteja los derechos de los ciudadanos bajo el prisma del debido proceso y garantice seguridad jurídica.

Al contar con la igualdad de oportunidades que debe existir en todo Estado social de Derecho, también es de vital importancia que cualquier egresado de la universidad debe poder considerarse parte de la élite académica.

Para ello es necesario que el nivel educativo de esta casa de estudio, como vanguardia intelectual de la nación crezca y se difunda. Decía también nuestro primer rector “Todos los hombres son aptos para perpetuar la especie, pero la naturaleza forma y escoge aquellos que son dignos de perpetuar la idea”.

Desde José María Vargas han transcurrido casi 293 años, así que, después de nuestro largo recorrido, al llegar donde estamos, hoy podemos mirar atrás y ver como no existió un solo camino que finaliza bajo el éxito que traen estas majestuosas nubes de Calder. Esta casa que cuando entramos nos encontró con tanta diversidad, sin importarle de donde veníamos, sur, norte, este u oeste; como lucíamos; altos, bajos, gordos, flacos, blancos, negros; o que fuéramos jóvenes, o ya hombres o mujeres, madres o padres, nos acogió, y a partir de ahora nos terminó uniendo a todos con un lazo eterno.

Hoy nos despedimos momentáneamente de ella hermanados en este crisol, como abogados de la gloriosa Universidad Central de Venezuela.

Muchas gracias y mis sinceras felicidades a los graduandos.

balanza

XIV Reunión Nacional de Profesores de Derecho Internacional Privado

Universidad Monteávila, 27 de mayo de 2014

En la edición Décima Cuarta de la Reunión Nacional de Profesores de Derecho Internacional Privado, celebrada en la Universidad Monteávila el 27 de mayo de 2014, se dieron cita profesores de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), Universidad Metropolitana (UNIMET), Universidad del Zulia (LUZ), Universidad Rafael Belloso Chacín (URBE) y de la Universidad Monteávila (UMA).

Siguiendo el orden de la agenda pautada, entre los asuntos planteados destacó el tema de la enseñanza del Derecho internacional privado y las diversas formas de abordar el temario de los programas, especialmente en lo relativo al estudio de la parte general de la disciplina a través de la parte especial, poniendo énfasis en la resolución de casos prácticos.

Asimismo, se discutió acerca de las debilidades de los jueces superiores, defensores públicos y fiscales del Ministerio Público, para afrontar los problemas de Derecho internacional privado que se presentan ante la jurisdicción venezolana. Especialmente, en cuanto al conocimiento del Derecho comparado y su utilidad como instrumento para la resolución de los casos, el conocimiento de las normas imperativas, la diferencia entre el orden público interno y la excepción de orden público internacional o cláusula de reserva.

Ante estas observaciones, las cuales fueron ilustradas con casos concretos, se llegó a la conclusión que es necesario, a fin contribuir con la labor de formación de las cátedras en esta materia, avocarse a la preparación de talleres dirigidos a jueces, fiscales, defensores públicos y demás funcionarios que laboran en la administración de justicia.

Se informó además acerca de las dificultades en torno a la publicación de material de apoyo de las cátedras (bajos inventarios de papel y tinta reportados por las imprentas, reproducciones ilegales de las publicaciones, etc.), como es el caso de la Ley Comentada de Derecho Internacional Privado publicada en el año 2005.

En el marco de la reunión, finalmente se advirtió, en relación a la actividad normativa, sobre la importancia que reviste para Venezuela la ratificación de instrumentos internacionales en materia de cooperación judicial internacional, como es el caso del Convenio de La Haya para Facilitar el Acceso Internacional a la Justicia, la Convención Interamericana sobre Cumplimiento de Medidas Cautelares y las convenciones vinculadas con las obligaciones alimentarias, para lo cual se hizo un llamado a los asistentes a unir esfuerzos con miras a colaborar en favor de dicha causa.

Por otra parte, como es tradición, el encuentro cerró con un ciclo de conferencias que contó con público invitado, esta vez sobre Derecho Familiar Internacional, en el cual intervinieron diversos profesores que presentaron sus respectivas colaboraciones en el Libro Homenaje a la profesora Haydée Barrios. Así, intervinieron: Eugenio Hernandez-Bretón, quien fungió de anfitrión, Anna María Tambasco, Andrés Carrasquero, Mirian Rodríguez, Javier Ochoa, Yaritza Pérez, Claudia Lugo, Víctor Garrido, Ivette Esis y Francisco Suárez, como moderador del evento.

Durante la jornada, se informó sobre la modesta incursión, en el caso venezolano, del uso de la tecnología y las telecomunicaciones para la práctica de algunos actos procesales a distancia, como las video conferencias y el uso del chat, concretamente en casos de restitución de menores. Como complemento se informó, en el marco de los convenios de La Haya, que pronto estarán disponibles, a un costo de 75 euros,  los manuales prácticos de cada una de las convenciones.

También quedaron en evidencia, en materia jurisprudencial, las debilidades que en cuanto a los fallos recurrentemente se presentan, principalmente vinculadas con los siguientes aspectos:

  • En el reconocimiento de sentencias extranjeras se niega el pase por la constante confusión entre la excepción de orden público internacional y el orden público interno. Se sigue revisando la excepción orden público en los casos de aplicación del artículo 53 de la  Ley de Derecho Internacional Privado, pese a no estar incluida entre los requisitos legales.
  • También en ese orden, se sigue invocando el fraude a la ley como requisito para negar el pase de sentencias extranjeras, a pesar que tal figura no está prevista para tales efectos en la  Ley de Derecho Internacional Privado.
  • No se analizan las fuentes de Derecho establecidas en el artículo 1 de la  Ley de Derecho Internacional Privado y se pasa directamente a conocer el caso con fundamento en el artículo 53 eiusdem, siendo necesario que ello se efectúe para determinar la falta de tratados entre los estados involucrados.
  • Se han aplicado normas derogadas por la propia Ley de Derecho Internacional Privado, como es el caso del artículo 9 del Código Civil.
  • El proceso de exequátur está caracterizado por su lentitud.
  • Se ha declarado el pase parcial de fallos sin expresar su fundamento legal, cual es el artículo 54 de  Ley de Derecho Internacional Privado.
  • Sigue arraigado el pensamiento y accionar territorialista en defensa de la soberanía nacional, en detrimento del verdadero fundamento de la cooperación judicial internacional, a saber, la garantía constitucional de la tutela judicial efectiva.
  • En cuanto a la determinación de la jurisdicción venezolana, en los supuestos de domicilio del demandado domiciliado en Venezuela para los cuales corresponde aplicar el artículo 39 eiusdem, la mayoría de los casos se analizan con fundamento en el artículo 42, ordinal 1° de la  Ley de Derecho Internacional Privado, aplicable en materia de  acciones sobre estado y relaciones familiares, y solo para los supuestos de domicilio del demandado en el extranjero.
  • En materia de jurisdicción sobre bienes inmuebles situados en la República y que forman parte de una universalidad de bienes (comunidad de gananciales, comunidad sucesoral, comunidad de la quiebra), se presentó una opinión distinta a la doctrina reiterada de las Salas Políticoadministrativa y de Casación Civil. Los profesores han hecho un llamado de atención en cuanto a la interpretación jurisprudencial que se ha dado al artículo 53, ordinal 3° de la  Ley de Derecho Internacional Privado, según el cual las sentencias extranjeras surtirán efectos en Venezuela, siempre que “Que no versen sobre derechos reales respecto a bienes inmuebles situados en la República o que no se haya arrebatado a Venezuela la jurisdicción exclusiva que le correspondiere para conocer del negocio”. A tales efectos, el llamado de atención, basado en la teoría general de los bienes, recayó en la necesidad de resaltar que tal supuesto es aplicable a los bienes inmuebles sitos en Venezuela que son objeto directo de derechos reales, vale decir, considerados aisladamente, respecto a los cuales, es indudable la jurisdicción exclusiva y excluyente establecida a favor de los jueces venezolanos; y por tanto, no para aquellos inmuebles que forman parte de universalidades, por cuanto para estos últimos es aplicable el supuesto contenido en el artículo 41 de la Ley de Derecho internacional privado, relativo a acciones sobre universalidades de bienes cuando el domicilio del demandado está en el extranjero, el cual no constituye un caso de jurisdicción exclusiva.
  • En referencia a los criterios atributivos de jurisdicción de los jueces venezolanos, se observó que existen varios pronunciamientos de la Sala Políticoadministrativa en los cuales esta estableció su propia jurisdicción con base en la nacionalidad venezolana del menor y en el principio del interés superior del niño, factores que no son criterios atributivos de jurisdicción de conformidad con el artículo 42 de  Ley de Derecho Internacional Privado..
  • En materia de reconocimiento de sentencias extranjeras, se consideró la importancia de la justicia material del caso, para lo cual se hizo un llamado a la interpretación funcional de las causales de divorcio extranjeras y a la aplicación del “orden público atenuado”, entre otros supuestos, en los casos de divorcio por repudio y otras causales fundadas en razones discriminatorias, si la solicitud de exequátur es hecha por la esposa, para los cuales debería considerársele el pase a la sentencia considerando solo el efecto del dispositivo del fallo extranjero, es decir, la declaratoria de disolución del vínculo matrimonial, supuesto que sí es aceptado por nuestro país.
  • Se dieron algunas pautas que podrían acelerar el proceso de exequátur, como es la de realizar la solicitud de exequátur por todos los interesados a fin de evitar la demora en la citación.
  • En materia de obligación alimentaria, se destacó la necesidad de aprobación y ratificación por parte de Venezuela de la Convención de La Haya sobre Cobro Internacional de Alimentos para los Niños y otros Miembros de la Familia, de la Convención de La Haya y de la Convención Interamericana sobre Obligaciones Alimentarias, a fin de proteger los derechos alimentarios de los niños, niñas y adolescentes. Vista la demora en la ratificación de estos convenios se sugirió realizar por parte del estado venezolano la celebración de tratados bilaterales para garantizar el cumplimiento del pago de las pensiones alimenticias de los menores.

Como siempre, ambas sesiones fueron muy productivas y sirvieron para recordar la labor y el ejemplo de la profesora Tatiana de Maekelt.  En esta ocasión, también se hizo un recuerdo de su hija, Irene de Valera,  colaboradora de estas reuniones de profesores de Derecho internacional privado. Para el año 2015, se planea celebrar la XV reunión nacional en la sede de la Universidad Metropolitana.

Elaborado por

Abg. Bernadette Rodríguez Nedelka

Con la colaboración de:

Dr. Eugenio Hernández-Bretón

Dra. Mirian Rodríguez de Mezoa

Dra. Yaritza Pérez Pacheco

 

Una respuesta a “4 Reseñas

  1. Alfredo Alvarez Millán

    agosto 8, 2013 at 4:26 pm

    felicitaciones y agradecimiento a la Maestría en Derecho Internacional Privado y Comparado de la Universidad Central de Venezuela, por haber traído a tan excelente profesora para impartir sus conocimientos. Iniciativas como estas nos hacen crecer como profesionales y académicos. Saludos!

     

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